rmaidana@a24.com (Roberto Adrián Maidana)
«Está jugando con fuego», le dijo el canciller de China al embajador de Estados Unidos, quien fue llamado de emergencia para plantearle la gravedad de la crisis desatada por la visita de menos de 24 horas de Nancy Pelosi a Taiwán. La presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. ya está en viaje a Corea del Sur, pero dejó atrás la peor crisis entre ambos países desde que establecieron relaciones diplomáticas en 1979.
EmbedTensión con China: «EE.UU. no abandonará a Taiwán»
Nancy Pelosi logró uno de sus propósitos del viaje. Se reunió con Tsai Ing-wen, presidenta de China nacionalista. A ella le dejó una frase que replicó de inmediato en Beijing. «Estados Unidos ha venido para dejar claro que no abandonaremos a Taiwán».
Pero la actitud de Nancy Pelosi desató una tormenta en el peor momento para los Estados Unidos, con el frente abierto con Rusia por la invasión a Ucrania, el apoyo económico en armamento y las sanciones contra Vladimir Putin y la Federación Rusa a nivel internacional.
Ahora se suma este roce durísimo con China. El Gobierno de ese país convocó de urgencia al embajador estadounidense en Beijing, Nicholas Burns, para expresarle su protesta por la visita y advertirle de que su país «está jugando con fuego». La misma frase que Xi jinping le dijo a Joe Biden por videoconferencia.
Este miércoles, horas antes de que Nancy Pelosi abandonara la isla, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, definió el viaje a Taiwán como «una completa farsa» que «viola gravemente la soberanía» de su país. «Quien ofenda a China será castigado», advirtió como una profecía el funcionario chino.
Nancy Pelosi tuvo una importante reunión con la presidenta de Taiwán. Hablaron con Tsai Ing-wen sobre la salvaguardia de las libertades, la democracia y los derechos humanos.
Pero mientras tanto, en la Casa Blanca, la evaluación de la presencia de Nancy Pelosi en Taiwán fue totalmente diferente.
joe biden por Pelosi.jpg
Joe Biden, ¿líder en retirada o fortalecido?
En los Estados Unidos se especula con la inconveniencia del viaje y el papel que jugó el presidente Joe Biden. Los asesores de la Casa Blanca le pleantearon reiteradas veces que Nancy Pelosi debía pasar de largo sobre la isla de Formosa (en donde está Taiwán). Sin embargo, Joe Biden hizo declaraciones formales, pero se negó a decirle personalmente que desistiera de esa polémica escala.
La razón formal fue que Joe Biden, ex senador, tiene un gra respeto por la división de poderes. Además, contrasta en todo lo que puede con lo que fue el estilo Trump. Pero la opinión pública y los medios cuestionan las razones de estado que hacían aconsejable no ir a Taiwán.Estados Unidos tiene un frente abierto con Rusia. Hubo numerosas gestiones – de todo tipo – para evitar el apoyo de China con armas o dinero a Rusia en la guerra con Ucrania. Hasta aquí dieron resultado, pero China ha tomado la presencia de Pelosi en Taiwán como una ofensa grave. El líderazgo de Biden esta cuestionado, su reputación en baja y hasta se cuestiona su propia lucidez mental para ser el presidente de los Estados Unidos. No puede esperar apoyo de Europa, enfrascado en la Guerra entre Rusia y Ucrania y la crisis.
Pero hay otros – minoritarios – que ven en esta crisis una oportunidad para que Joe Biden muestre un liderazgo frente a la gran potencia comercial que es China. En la Casa Blanca afirman que en las conversaciones reservadas, Biden le dijo a Xi Jinping que apoyar activamente a Putin, dejaría a China – por medio de sanciones – sin el mercado norteamericano y europeo.
xi y las represalias.jpg
Xi jinping cumplió hasta ahora. Habló de una unión inquebrantable con Rusia. Pero en los hechos, no hubo apoyo militar o económico. Todo puede cambiar después de la visita de Pelosi a Taiwán.
La primera medida de China ha sido despelgar tanques sobre la zona próxima al estrecho con la isla de Formosa. También desplegaron aviones que sobrevolaron el espacio aéreo de Taiwán aún con Pelosi en ese lugar. Ahora comenzarán tres días de ejercicios militares en la zona.
Pero queda pendiente veer cómo China cumplirá su advertencia: «El que juega con fuego se quema».
