Durante la reunión plenaria del Consejo Consultivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), con sede en la ciudad de París, la embajadora argentina ante ese organismo, Marcela Losardo, sostuvo que “el mundo experimenta una creciente y sostenida conflictividad con nuevas amenazas a la paz y a la estabilidad de nuestras sociedades. Los discursos de odio buscan erosionar la paz y el Estado de Derecho, bases fundamentales de nuestra convivencia democrática”.
Así, en la 215ª asamblea plenaria cuya vicepresidencia es ejercida por nuestro país en representación de la región de América Latina y el Caribe, Losardo señaló que “hace apenas poco más de un mes estos discursos de odio hicieron eco en Argentina, en donde hemos vivido hechos de suma gravedad institucional, como el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Fue además un atentado directo contra la tranquilidad pública y contra una construcción colectiva que en Argentina lleva casi 40 años: el acuerdo del “Nunca Más” al terrorismo y a la violencia política, un acuerdo que es símbolo de que valoramos la democracia como un modelo de desarrollo social que exige respetar al otro en la diversidad”.
“Como remarcó recientemente nuestro Presidente Alberto Fernández en su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, ´debemos trabajar de un modo mancomunado y solidario; debemos robustecer un multilateralismo cooperativo, que nos asegure el fortalecimiento del Estado de Derecho, el imperio de la no violencia y una mayor equidad para reducir las brechas sociales´. Para ello está la UNESCO, para transformar positivamente la realidad. Estemos todos a la altura de ese compromiso. Pueden contar para estos objetivos con la República Argentina”, añadió.
Con la presencia de la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, en el transcurso del encuentro multilateral la embajadora Losardo afirmó: “Debemos luchar por recuperar urgentemente la cultura de paz, la tolerancia, el diálogo y el respeto a la diversidad. Éste es nuestro mandato. Resulta indispensable que cesen todas las hostilidades existentes y trabajar más unidos que nunca para recuperar estos valores fundamentales. La Argentina ha defendido siempre la solución pacífica de cualquier controversia”.
Asimismo, puso de relieve que “la Argentina se encuentra firmemente comprometida con el derecho a la educación, que reconocemos como un derecho humano fundamental, un bien público social y una responsabilidad indelegable de los Estados. Reafirmamos el carácter integral de la calidad de la educación, que debe estar relacionado con la inclusión, la ampliación de oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida y las condiciones de bienestar de docentes y estudiantes. Por ello es que el Estado argentino asegura la gratuidad en el acceso a la educación desde el nivel inicial hasta el universitario”.
Recordó que durante las reuniones del organismo sobre la Transformación de la Educación, que ubican a la educación en el más alto nivel de la agenda política para darle nuevo impulso y transformarla, “la Argentina presentó sus compromisos nacionales y fue propuesta como “champion” de la educación por su alto nivel de compromiso y por sus políticas implementadas”. Destacó la IIIª Reunión Regional de Ministras y Ministros de Educación de América Latina y el Caribe que organizó nuestro país este año, donde se aprobó la Declaración de Buenos Aires y una nueva Hoja de Ruta Regional, y el consenso respecto a la importancia de la financiación de la educación que los Estados deben garantizar.
“Hemos reconocido a la cultura su carácter de bien público mundial. Debemos construir políticas culturales inclusivas que permitan dar respuestas a los grandes conflictos que atraviesa la humanidad y trabajar unidos por una cultura del cuidado en un sentido amplio y profundo, una cultura de la vida”, puntualizó, al tiempo que destacó “la importancia que tienen las industrias culturales para el desarrollo económico y la matriz productiva de cada país. Por ello es necesario establecer mecanismos para reducir la brecha digital, un problema que da cuenta de la enorme desigualdad de nuestras sociedades”.
Losardo puso en valor los avances en relación “a la Convención sobre la protección del patrimonio mundial, cultural y natural, destacamos los avances que se han logrado con relación a los sitios de memoria. Como Vicepresidentes del Comité de Patrimonio, reiteramos nuestro fuerte compromiso y responsabilidad para hacer avanzar esta importante agenda de trabajo”.
Sobre el final manifestó: “Enfrentamos una proliferación de discursos extremistas y de odio, de campañas de desinformación e informaciones falsas. Debemos seguir ocupándonos para preservar el derecho al acceso a informaciones confiables y verídicas, las cuales resultan fundamentales para la vida democrática, y continuar trabajando por la defensa de la libertad de expresión, el desarrollo de medios libres e independientes y la seguridad de los periodistas. Como miembro del Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación (PIDC) la Argentina ratifica su compromiso con estas labores y seguiremos apoyando el trabajo de la organización para la reducción de las desigualdades de género y la lucha contra todo tipo de discriminación racial, sexual o social.