Entre las numerosas reuniones bilaterales que mantuvo este jueves en el marco de la reunión del Consejo de Ministros de la OCDE, la Canciller Diana Mondino conversó con el Ministro de Asuntos Económicos, Educación e Investigación de Suiza, Guy Palmerin, con quien repasó los temas destacados de la agenda común y la realidad internacional. Además, analizaron la situación de las negociaciones MERCOSUR- EFTA, ya que Suiza es parte de este bloque europeo junto a Islandia, Liechtenstein y Noruega.
Luego de un encuentro con la Directora de Asuntos Legales de la OCDE, Gita Kothari, para considerar los aspectos técnicos de la accesión y la necesidad de coordinación no solo a nivel nacional sino provincial, la Canciller se reunió con Valdis Dombrovskis, Comisario de Comercio y Vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, a quien expresó la importancia de seguir profundizando el vínculo bilateral económico-comercial y de inversión como socios y mejorar los resultados de la balanza comercial de bienes y servicios. También reiteró la importancia de poder concretar el postergado Acuerdo MERCOSUR – UE.
En otro capítulo de su agenda de trabajo, Mondino dialogó con el Ministro de Economía e Industria de Israel, Nir Barkat, sobre el estado del vínculo comercial bilateral entre ambas naciones. Asimismo, la ministro manifestó el interés en impulsar el comercio de servicios y la internacionalización de startups argentinas, como así también la cooperación y complementación de empresas tecnológicas de Argentina e Israel.
Paralelamente a la serie de encuentros con autoridades políticas, la titular de la diplomacia argentina se entrevistó con Christel Bories, Presidenta y Directora General de Eramet, grupo francés líder mundial en los sectores de metales y aleaciones, que mantiene inversiones en la Argentina. Desde el año 2012, el Grupo Eramet viene desarrollando un proyecto de extracción de litio en el salar Centenario-Ratones, ubicado en la provincia de Salta, que, a través de su filial argentina Eramine Sudamérica, consiste en su primera fase en la construcción de una planta de producción de 24.000 toneladas de carbonato de litio (LCE1) anuales durante al menos 40 años. La inversión requerida se estima en alrededor de USD 600 millones, de los cuales ya se han invertido 210 millones.
